Luna Nueva del 22 de marzo de 2012

La Luna Nueva se produce a 2º 22´ de Aries

Esta Luna Nueva en el signo de Aries viene bien acompañada. Dos días antes de la lunación, hemos entrado en el equinoccio de primavera (con esa fuerza que la caracteriza). Después comienzan los tres festivales espirituales de Lunas Llenas: el primero es con la Luna Llena de Aries y se conoce como “la Pascua” o “del Cristo” que es la festividad Cristiana. Después viene el del Buda, “Wesak”, que es la festividad de Oriente en la Luna Llena de Tauro y finalmente tenemos el de “la Buena Voluntad” con la Luna Llena en Géminis, que es el festival de la Humanidad. Con este cúmulo de energías más las tormentas solares que se avecinan, disponemos de una gran fuerza para cambiar cuestiones personales, sociales, políticas, etc. Tenemos tantas posibilidades para escoger, que se puede comparar a esos videojuegos donde se necesita pasar de
nivel o atravesar alguna puerta para avanzar. Pero, si repetimos errores una y otra vez bien porque no nos damos cuenta o porque no comprendemos todo el juego porque no lo conocemos, entonces lo mas seguro es que nos quedemos donde estamos a seguir experimentando en ese lugar. Otras veces, después de comprender todo el juego, no queremos cruzar la puerta para pasar al siguiente
nivel porque aquí tenemos seguridad.

En esta Luna Nueva disponemos de una energía que se puede denominar como “puerta de entrada”; las puertas nos permiten cambiar de realidad cuando cruzamos su umbral o permanecer igual si no llegamos a cruzarla (física-emocional y mentalmente). Cruzar las puertas son oportunidades para crecer.

Los ciudadanos estamos a la expectativa de los posibles cambios sociales que puedan llegar, sin embargo, todo es relativo porque depende de los mecanismos que se pongan en marcha. Estamos en un momento de transición donde unos valores que
fueron útiles durante algo más de un siglo han dejado de serlo. Nuestras
conciencias y nuestros razonamientos han alcanzado un estado de discernimiento que nos permite distinguir más claramente la realidad de la ilusión o lo verdadero de lo falso en las personas, en las instituciones públicas y privadas, en gobiernos, en las leyes, etc. Gracias a ello, cada vez es más frecuente dar a conocer los escándalos, abusos y corrupciones políticas, económicas, judiciales, financieras, etc. Las medidas necesarias para cambiar este sistema caducado puede que no se pongan en marcha en su momento pero, si es así, será como una olla a presión que, cuando esté muy caliente, se dejará oír socialmente.

Las“nuevas” verdades o las puertas que dan acceso a nuevas formas de entender el mundo y a las personas, se abren para que demos un cambio. El cambio consiste en elevar nuestra personalidad actuando de forma más sincera y honesta, sintiendo las emociones de forma más pura y desinteresada y pensar con el corazón para no dejar heridas teniendo en cuenta a todos: conocidos, desconocidos e incluso supuestos enemigos. Todo esto es para que mejoremos y así que influya en nuestro entorno.

En la presente Luna Nueva, también disponemos de otra energía que se puede denominar “constructora”.
Esta fuerza actúa para restablecer contratiempos o adversidades y las
personas podemos influenciarnos de ella para restablecer una situación de inestable a estable. La forma de conseguirlo normalmente es gracias a la experiencia acumulada en situaciones parecidas, más la capacidad de poner en marcha la situación.

Cada persona actuamos en diferentes entornos: familiar, laboral, empresarial, político,etc. donde deberíamos aplicar todas nuestras capacidades para mejorar las situaciones enfermas. Un gran lastre que solemos tener las personas es conformarnos con la situación existente sin decir nada para no incomodar. Por no dar una imagen distinta de la que creemos que tienen los demás de nosotros, aguantamos o soportamos infinidad de situaciones molestas en la familia, en el trabajo, en la política, etc. Envolvemos esta realidad en una máscara para que no se deje ver y vivimos así muchos años hasta que enfermamos o cambiamos.

Pues bien, las energías para cambiar las tenemos delante nuestra. Somos nosotros los que tenemos que re-estructurar nuestros cimientos, nuestras bases, con los materiales que existen hoy día que son una versión distinta de los utilizados anteriormente. Tenemos que ser capaces de comprender la necesidad que tenemos de encontrar mejores valores de convivencia (familia, trabajo, sociedad, política, etc.) y de ampliar nuestra comprensión del Amor: primero en nosotros y después en los demás, tanto en lo que hacemos, como en lo que sentimos y en lo que pensamos.

Que la Luz sea contigo