La Luna Nueva se produce a 13º 30' de Aries.
La energía que tenemos en la presente Luna Nueva se identifica con el sentido de la palabra libertad: libertad para los oprimidos y prisioneros. En nuestra personalidad (física, emotiva y mental), los prisioneros son las tendencias que reprimimos, que no dejamos que se manifiesten tal cual son porque, quizás, tengamos que esforzarnos por abandonar una zona de confort o de poder. Para liberar nuestras tendencias emotivas o mentales, tenemos que entender el valor de la verdad y de la justicia. Algunas veces creemos que estamos en el uso de la verdad, pero quizás lo que estamos haciendo es imponer nuestra ley y nuestros comportamientos a los demás. Y en esta imposición también hacemos prisioneros al limitar el desarrollo de los demás. Muchas veces el confort del que disfrutamos, procede de la dependencia que tenemos de otros para que solucionen nuestras situaciones. Las Energías Cósmicas nos traen mensajes, verdades que son esencias de valores que no llegamos a captar en toda su amplitud, pues son una fuerza unitaria que limpia y nos hace retornar a nuestros estados primarios de pureza. Pero solo recogemos las migajas de esa verdad, una parte limitada de poder que, además, desarrollamos con arrogancia y prepotencia para destacar y situarnos por encima de otros. Lo que llamamos Verdad nos tiene que traer Libertad, y la Libertad nos debería traer Justicia, y así podremos ir construyendo el mundo en el que queremos vivir con los demás. Por tanto, en nuestra vida cotidiana, si no respondemos a estas energías adecuadamente, podemos tener entre otras las siguientes vivencias: en unas negaremos aquello que sabemos, en otras decidiremos calumniar por el simple hecho de levantar un falso testimonio aprovechando que los demás ignoran la verdad y en otras seremos el que justifica a los que se saben culpables. Y esta situación tratará de decirnos que internamente tenemos que armonizarnos para mejorar nuestros valores. Por otro lado, esta Luna Nueva nos trae la fuerza necesaria para restablecer las adversidades de nuestras malas construcciones físicas, emotivas y mentales. Por adversidad se entiende, el resultado de un acto contrario a las Leyes Cósmicas que suelen ser impulsados por nuestros deseos. Si somos capaces de interiorizar esta Fuerza Cósmica, todo lo que construyamos en nuestra propia naturaleza llevará el sello de firmeza, de verdadero, de estable. Partiendo de la base que todo ha sido hecho para el hombre, nosotros, por analogía, debemos hacerlo por nuestros semejantes, en la familia, en la economía, en la salud, en la educación, en la política, etc., exteriorizando en nuestras relaciones lo mejor que tengamos para dar. Ahora vivimos momentos de cambios donde viejas estructuras ya no se aguantan. Es el momento de aplicar los cambios que reconocemos necesarios en nosotros para seguir el ritmo de las Fuerzas de la Naturaleza. Pero si no entendemos esta fuerza o no vemos los cambios que tenemos que hacer, podremos vivir situaciones de hipocresía, de falsos testimonios, falsas certificaciones, etc. donde la verdad no se ve pero su falta de nobleza será notoria. Estas circunstancias nos estarán diciendo que tenemos que tener fidelidad de compromiso a la palabra dada y reconocimiento a la verdad. Deberíamos ir desarrollando el concepto de verdad en la medida que podamos para vivir con más confianza en nosotros mismos y, en la medida que reconocemos lo que hacemos, el Amor comenzará a brotar como un manantial que riega nuestras necesidades y nos calma la sed. En los momentos difíciles, si hacemos las cosas con Amor, nos sentiremos mejor y lo demás llegará por sí solo.
Que la Luz sea contigo.
