Luna Nueva del 1 de junio de 2011

La Luna Nueva se produce a 11º 02' de Géminis.

En la presente Luna Nueva se libera la energía de purificación que nos ayudará a limpiar lo que está sucio: tal como hacemos con las ropas que vestimos, así también tendremos que hacerlo con nuestra personalidad tanto física como de deseos-emotiva y mental.

La mente es la herramienta con la que podemos blanquear nuestras situaciones pero también la podemos utilizar con rigidez para mantener ciertas tendencias y no hacer el esfuerzo necesario de cambiar, manteniendo nuestras ideas fijas y negándonos a ver y oír. En estos casos es donde actúa esta energía, creando un puente que comunica nuestra personalidad con nuestro Yo Superior, para que la mente inferior pueda comprender a la superior y así cambiar nuestras tendencias purificándolas.

Cuando comprendemos que tenemos que cambiar nuestras tendencias, prestamos atención a nuestros hábitos intentando depurarlos, razón por la cual estos se depuran: el tabaco, alcohol, drogas o rabia, celos, imposición, rigidez, etc. Así pasa con todo y todo se diluye. Entonces surgen en ese nuevo estado otras condiciones de crear vida en nosotros y, a la vez, en el propio entorno, aportando mejores respuestas y mejores métodos.

En nuestra vida cotidiana podemos ver como cambian las estructuras urbanísticas con calles más anchas, pequeños jardines, edificios con nuevas formas, etc. Ahora comenzamos una etapa en las estructuras sociales, donde la gente pide a gritos en la calle nuevas leyes más aptas para suprimir los abusos financieros, bancarios, políticos y mejoras educativas y sociales. En nuestro núcleo familiar tenemos que integrar otras formas en nuestras relaciones de pareja, hijos, padres, hermanos, generando más responsabilidad y, por tanto, menos dependencia.

En esta Luna Nueva tenemos otra energía que se podría llamar renacer, es decir, que cuando hemos agotado un ciclo, como puede ser una relación, un empleo, una Fe, o el final de una enfermedad, de una opresión, de una desesperanza, se comienza a ver un nuevo amanecer. Así como el “Ave Fénix” que resurge de sus propias cenizas, nosotros tenemos que trasformar nuestra propia realidad.

Cuando elevamos el estado de conciencia, la forma de interpretar la realidad cambia y ahí donde antes veíamos un problema, ahora vemos una oportunidad. Todo ha cambiado y empezamos una nueva etapa.

En nuestra vida cotidiana pondremos fin a determinas situaciones pero, si nos precipitamos en tratar de poner fin a una situación sin haberla agotado, nos resultara imposible terminar el ciclo y las personas involucradas o las cosas que debemos aprender nos seguirán reclamando.

Cuando descubrimos nuevas verdades o nuevas formas para ayudarnos a resolver determinadas situaciones, todo cambia a nuestro alrededor. La vida toma un significado distinto y donde antes poníamos rigidez, ahora nos reímos. Hemos retirado de nuestra forma de sentir o de pensar, el miedo o la idea que nos encadenaba a actuar de una forma determinada.

De esta forma comienza a surgir espontáneamente una fuerza que nos hace sentir, estar y pensar con más libertad, ya no luchamos por imponer nuestra personalidad actuando-sintiendo-pensando, sino que respetamos (con Amor) que cada cual avance con su propia Luz y a su modo.

Que la Luz sea contigo.