Luna Nueva el 23 de enero de 2012

La Luna se produce a 2º 42´ de Acuario

Comenzamos un nuevo año donde, económicamente, todo parece un misterio que nadie puede predecir. Podemos tener grandes expectativas de cambios o no tenerlas pero, lo importante en estos momentos, es que podamos estar tranquilos sabiendo que todo lo que vivimos es un aprendizaje y, si aprendemos a observarnos, podemos preparar los acontecimientos y anticipar las respuestas que queremos dar en las distintas situaciones de la vida.

En esta Luna Nueva, una de las energías que se presenta se caracteriza por querer purificar nuestro mundo interno y, si conseguimos realizar tal cosa, podremos ayudar a nuestro entorno a limpiarse y purificarse. Si nos interesa purificar algo de nuestra personalidad (física, emotiva o mental), es porque consideramos contaminada alguna de sus partes. Por ejemplo: la contaminación puede ser por sustancias ideológicas (ideas estáticas que no queremos actualizar), por sustancias emotivas (el sentimiento que nos une a un grupo o un pueblo y nos separa de otros al considerarlos distintos) o por sustancias físicas (una enfermedad que nos limita). La purificación nos ayudará a salir de situaciones atascadas y ampliar nuestra visión para tratar de ver un conjunto mayor.

Todo lo que sucede a nuestro alrededor es una manifestación de lo que nos está sucediendo en nuestro interior, así que, cuando no nos damos cuenta de lo que grita nuestro interior, se nos manifiesta en las cuestiones de la vida.

Por otro lado, en la presente Luna también disponemos de otra energía que se puede denominar como afinidad o amistad. En la ciencia de la afinidad es donde se puede encontrar la relación emocional que existe, por ejemplo, entre una enfermedad y las cualidades que tienen las plantas para curarla, o también se puede comprender la relación de la enfermedad con una determinada situación emocional en la que estamos inmersos.

Esta visión de afinidades ayuda también a encontrar respuestas que no se conocen: partiendo del punto de vista de algo conocido se pueden encontrar los secretos que no conocemos de la naturaleza, de los signos del zodiaco o de planos invisibles porque son evidencias que están ahí y que solo vemos cuando tomamos conciencia. Hermes Trimegisto trajo el axioma de “lo que está arriba es como lo que esta abajo” por tanto, las personas que sepan captar estas energías, encontrarán analogías en muchas cosas ya que todo está en el Todo.

También se podrán realizar viajes que nos querrán decir que tenemos que viajar internamente para no desplazarnos físicamente.

Las personas que están en afinidad se hacen amigas y, de esta manera, aparecen los grandes amigos de toda la vida, formando una familia mayor que la sanguínea. Tod@s hemos querido, queremos y seguiremos queriendo y, con las experiencias vividas, deberíamos ir mejorando la calidad de nuestra forma de querer.

Con el Amor nos deberíamos ir sintiendo más libres, flexibles y cómodos con nosotros y, como consecuencia, con los demás. Del Amor incondicional surgirá la inteligencia que emana de la sabiduría de conocer cómo están los demás para acompañarles en sus necesidades sin pedirles nada. Así podrá surgir una creatividad emanada del Ser Superior que nos permitirá cambiar el mundo sin forzarlo.



Que la Luz sea contigo.