La Luna se produce a 18º 01´ de
Géminis
En este
sistema económico que vivimos la enfermedad es un negocio muy pero que muy
grande. Los lobbys se gastan grandísimas cantidades de dinero en publicidad
pero, además, se lo gastan en apoyar a los gobiernos para que formulen leyes a
su medida y en patrocinar universidades para formar médicos que mantengan el
sistema de consumir medicamentos. Los beneficios son enormes. Todo este
entramado lleva a crear enfermedades para buscar enfermos que consuman muchos
medicamentos y, debemos observar que, cuanto más medicamento tomamos, más
enfermos estamos. Todos conocemos personas que llevan años medicándose y no
mejoran los síntomas. ¡Qué cosa tan rara!, ¿verdad? Si están tomando
medicamentos “que curan”, lo más lógico es pensar que mejorarán y dejarán de
consumir fármacos, pero la realidad no es así. Estamos acostumbrados a tomar
fármacos y a no curarnos pero seguimos consumiendo fármacos. Bien es cierto que
alivian algunos síntomas, pero la realidad es que no curan. Estamos empezando a
despertar de estas mentiras tan difundidas: la medicación es un negocio donde
no existe la intención de curar sino de cronificar síntomas para mantener
enfermedades latentes. Los médicos generalmente confían tanto en lo que hacen,
que no se dan cuenta de la gran mentira de las farmacéuticas.
Vamos a
observar un poquito los acontecimientos de los tres meses anteriores ya que, en
las tres últimas lunas llenas, nos ha llegado una gran cantidad de
energía/información/luz a nuestro planeta. Nuestro cuerpo ha estado integrando
toda esta información no consciente como ha podido y, en ese proceso de
integración, ha tenido estados de cansancio, agotamiento, debilidad en piernas
y necesidad de dormir para poder descansar, etc. A partir de ahora, esa
información estará limpiando nuestro mundo mental, emocional y físico y, ese
proceso (que será de un tiempo indeterminado), nos pueden aflorar situaciones
de tensión, irritabilidad, nervios, etc. para terminar de ajustarnos o de
limpiarnos. Se trata de abandonar los
patrones físicos, emocionales y mentales que usamos cada día referente a la
familia, pareja, hijos, sociedad, economía, educación, etc. Estos patrones están
caducados y no constituyen respuestas adecuadas a la situación actual; se trata
de adaptarnos a nosotros mismos, de escucharnos y atendernos internamente, ya
que sentimos de una manera y nos comportamos de otra.
Vamos a
ver algunas de las energías disponibles para esta lunación como es el Genio 16
Hekamiah que proporciona victoria. La victoria surge cuando ganamos la batalla
a nuestras tendencias emotivas y quedan sublimadas, ahí es cuando aparece ese
hombre valiente y susceptible en lo referente a lo que se debe hacer. Así
empezamos a crear una nueva realidad o un nuevo universo donde podemos comenzar
a cambiar nuestros patrones (físicos, emocionales y mentales) y, al cambiar
nuestros patrones, influimos en las personas de nuestro entorno al proporcionar
otra alternativa para modificar sus estados emocionales. La forma de actuar es
mediante la inteligencia para plasmar, en este mundo material, una energía
liberadora de tensiones.
Tenemos
que saber que cada persona podemos modificar la realidad que vivimos porque
todo depende de lo que sintamos nosotr@s y, en ese sentir, es donde nos debemos
enfocar para generar el cambio. Se dice que los indios, cuando cantan y danzan
para llamar a la lluvia en una época de sequía, sienten el agua chapoteando en
los pies donde solo hay arena y polvo seco además de sentir la lluvia cayendo
en sus cuerpos. Ese sentimiento es una petición que provoca a las fuerzas de la
naturaleza que atiendan la solicitud y entonces llueve.
Otra
energía disponible es el Genio 7 Achaiah que nos proporciona paciencia la cual
surge de la necesidad de las fuerzas espirituales (cielo) de plasmarse en la
tierra. Es una energía de alta vibración que tiene que manifestarse en un mundo
denso ya que las estructuras creadas en este mundo denso, en principio, no
aceptan la llegada de nuevos valores y, aún siendo mejores, son rechazados. En
el evangelio de San Juan dice: “La Luz sobre las tinieblas resplandecen, más
las tinieblas no la comprendieron”. Sólo con el tiempo se conseguirá impregnar
esta fuerza en las realidades materiales porque la verdad siempre está presente
y espera pacientemente a ser descubierta por el hombre.
La vida
se puede entender como una aptitud de alegría en lo que hacemos en lo que
sentimos y en lo que pensamos.
Vivamos
con alegría.